martes, 27 de noviembre de 2007

(Art. 27) Cuento de navidad

La ajetreada vida de una mujer de negocios con una escala de valores algo atípica.

Cuando yo era pequeña, el día de Navidad me gustaba que nevase e hiciese frió. Me encantaba ir con mi bufanda, mis guantes, mi abrigo y mi gorro forrada entera y pasarlo bien jugando en la calle. Después llegar a casa con la nariz roja de frío, y beber dos gotitas de whisky canadiense que nos daba mi abuela porque ya éramos unos chicos mayores. Después nos sentábamos en la alfombra alrededor del abuelo y este contaba historias de navidad al calor del fuego de la chimenea. La que mas me gustaba era la de “abre los ojos por si pasa un tipo gordo vestido de rojo.”

Ahora soy una mujer de negocios, y no tengo tiempo de pensar en esas bobadas, tengo una vida muy ocupada, y una agenda con descansos de treinta segundos entre horas. Me dedico a la compra venta de locales, tengo una compañía en cada ciudad del mundo. Allí donde se vende un local a la baja, porque no obtiene beneficios, no tiene trabajadores, o no tiene clientes, estoy yo.

Compro por poco, muy poco. Contrato los empleados justos y necesarios, a veces eso implica despedir, siempre implica despedir. Y hago que la calidad suba y el balance sea favorable, justo en ese momento vendo a la alza. No quiero manejar un alto volumen de negocios y tener que pagar el pan de muchos empleados, prefiero haber sido la jefa de mucho que pago a pocos. Es un negocio sin demasiado riesgo, o casi nulo. Solo necesitas el dinero suficiente para comprar y siempre encontraras alguien dispuesto a pagar más de lo que tú pagaste, generalmente, mucho más.

Bueno, os hablaba de mí. También tengo familia, pero esto lo cuento después. Primero los negocios, después lo que surja. Dos niñas y un marido que las cría, en una casa distinta a la mía. El no aguantó que no les dedicase el tiempo suficiente y decidió abandonarme.

Me rodeo de mucha gente, necesito muchos contactos, aunque quizás no son mis amigos. Por las noches llego a casa agotada, una mansión gigante a las afueras de la ciudad con un jardín precioso, y una piscina. No se para que me sirve si no puedo disfrutarlo, muchas noches lloro amargamente mi solitaria vida, pero luego me doy cuenta de que no necesito a nadie.

Hoy es navidad, odio este día, la gente se reúne en familia, a quedar bien y a ser felices. Repugno esa hipocresía que derrocha la gente, yo trabajo, el mundo no se para, no lo haré yo. Pero no puedo evitar mientras camino por la calle pensar en esas historias que nos contaban mis abuelos a mí, a mis primos y hermanos, y sentir un poco de calidez en mis mejillas… Suspirar y mirar al cielo, y entonces veo pasar al gordo vestido de rojo… Siento que mi corazón salta en su pecho, y una sonrisa poco acostumbra se dibuja en mi rostro. Tengo energía para luchar tres años mas si es necesario, y algún día se que cambiare de vida.

(Art. 26) La dura vida del trabajador

A veces el trabajo soñado por muchos, no es lo más fácil para algunos.

“Pagaría (¡qué ironía!) por cinco minutos mas de sueño.” La noche de ayer fue larga y no esta hecha la vida para quien no sabe sufrir. En mi caso eso supone madrugar. Dieta equilibrada, ensalada, ni un miligramo mas ni uno menos, lo estrictamente indicado por mi nutricionista.

Ahora toca la cara amable del día, de mi día. Prepararme para el trabajo. Un par de horas “castigándome” en el gimnasio serán suficientes por hoy. Una sauna para relajar los músculos y limpiar poros, listo.

Tras la rutina del día a día, llega la parte creativa. Baile, atractivo, danza erótica, desfile, moda… Escoge una y vamos a estudiarla y trabajarla. Un visazo fuera de los libros… ¡La hora de comer! Todo lo anterior es lo que debo pagar para mantener mi elevado ritmo de vida.

Las tres casas en paraísos naturales de cinco habitaciones no se pagan solas. Suena mi móvil. “Señor dorado, hoy te necesito a ti. No cojas nada, yo te daré todo lo necesario.” Contesto: “Perfecto, como siempre.” Anoto la hora y la dirección en mi agenda, el poco tiempo que me queda lo gasto relajándome escuchando un poco la radio.

A la hora convenida con mi “agente” estoy en el lugar que se me requiere, como se me requiere y dispuesto a lo que se me requiera.

Me abre la puerta una joven rubia de unos veinte años con evidentes signos de embriaguez, me invita a pasar desapareciendo dejando la puerta abierta. Entro en una habitación, cojo mis esposas, mi látigo, mi uniforme de policía y aparezco con la música.

Se trata del cumpleaños de una joven y la particular sorpresa de sus seis amigas, la susodicha esta en el centro en una silla con los ojos vendados. Al menos… el trabajo de hoy será agradable.

La noche siempre es larga, vuelvo con un dinero extra en el bolsillo, una sonrisa en la cara y alguna duda en el alma.

lunes, 26 de noviembre de 2007

(Art. 25) Champán, besos y abrazos

Mi primera experiencia, como anfitrión no sale todo lo bien que tenia planeado. Es el momento de ampliar mis fronteras y buscar unas nuevas donde vivir.

“Será lo mejor para organizar bien las cosas.” Es lo que me decía mientras recogía mis cosas más necesarias y las metía en cajas y maletas. Y así con la mitad de mi vida clasificada en categorías abandonaba la casa que me vio crecer. “Volveré cuando todo termine.” Pienso mientras entro por la puerta de mi nuevo apartamento.

Cinco habitaciones, en pleno centro y un salón muy amplio. Una joya de apartamento que me cuesta sobre trescientos euros por semana, pero que bien los vale, y perfecto cumplirá su cometido.

Los días previos mi chica me ayuda con los preparativos y hacemos uso de la reciente adquisición, y no es el apartamento. Madrugones para comprar bebida y comida en abundancia, e ir a recoger algunos “encarguillos”. Pociones afrodisíacas a casa de mi amiga Laura, una farmacéutica de vocación. Cajas de preservativos y disfraces a la tienda de la Sole. Unos petardos donde Manu, que mejor que un poco de pirotecnia para alegrar la fiesta.

Con todo esto listo, preparamos los postres y enfriamos las bebidas. Ha llegado el día. Distribuimos todo lo demás. En unos minutos tendría que aparecer Rodri por la puerta con los adornos para la casa. Y después de todo esto, una siesta, hay que coger fuerzas para la noche.

“Despierta dormilón.” Me dice mi chica mientras me revuelve cariñosamente el pelo y me recomienda darme una ducha y arreglarme, porque pronto empezaran a llegar los invitados, no tienen que encontrarse al anfitrión desnudo en el baño, al menos, tan pronto.

Apenas he terminado de colocarme la mascara blanca de hueso ya suena el timbre de la puerta y los primeros pasos y voces se escuchan dentro de la casa. La fiesta ha comenzado. Durante las siguientes dos horas no para de llegar gente conocida con ganas de pasarlo bien.

El tiempo se va consumiendo y ahí estamos todos en el salón con la copa llena de champán en alto y gritando: “Doce, once, diez…” “Uno… ¡Feliz año nuevo a todos!” Brindis, besos, abrazos, caricias y sonrisas. Y el alcohol que no cesa.

Me levanto cuando el sol de la tarde se tumba para descansar, con dolor de cabeza pero contento por como salio en día anterior. Voy recogiendo las cosas y con todo dentro me dirijo hacia mi habitación en casa de mama inmerso en la laguna de mis olvidos. Es algo mucho más económico, la casa solo era para la fiesta, un mes solo no me ha sentado mal.

“¡Vaya! Ha cambiado la cerradura… Le pediré una a Jorge, el casero…” Me digo para mis adentros. “No creo que a los nuevos dueños les gustase que entres en su casa sin su permiso…” Me dice mientras mi cara de asombro aumenta.

“Mama, he ido a casa y el casero me ha dicho…” Le cuento por teléfono a mi madre, mientras la mujer, riendo, me explica que ha decidido vivir sus años de jubilada en una casita en Melbourne, al lado de la playa.
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Ale listo, petardo. Te dije que no te quería ver por aquí.. o sólo lo pensé? :S xD
:***

(Art. 24) El trabajo mas antiguo de la historia

Ante lo que muchos puedan pensar… No, no es el que se imaginan, la naturaleza humana siempre supo ir más allá.

Administro y gestiono día tras día una enorme cantidad de datos de distinta naturaleza con el fin de automatizar mi trabajo y hacerlo de la mejor manera posible, obteniendo los mejores resultados.

Más de cincuenta empleados organizados por mi persona, hombres y mujeres ambiciosos de distintas características. Algunos servicios extras contratados para facilitar el trabajo de los anteriores, esto sería, monitores de gimnasio, profesores, psicólogos y médicos.

Diecinueve despedidas de solteros este mes, parece la nueva moda, casarse. Varios servicios raros, de clientes habituales, alguna fiesta privada e incluso cenas de negocios. Mi trabajo es el más antiguo del mundo, intentar obtener beneficio a costa del trabajo de otras personas. Soy un “chulo". No es el trabajo que mi madre hubiese querido para mí antes de irse a Melbourne a vivir, pero aquí cada uno se lo “monta” como quiere, o como puede.

La relación de confianza es algo imprescindible, los contactos, saber negociar, al contrario de lo que muchos puedan pensar, no es un trabajo fácil. Siempre he de buscar la persona perfecta para el evento correspondiente. Cuidar a los viejos clientes y empleados, y captar nuevos empleados y clientes.

Mi móvil es una emisora de radio, no para de lanzar música durante todo el día. “¿Qué día sería? ¿Hora? ¿Lugar? ¿Tipo de evento? ¿Número de personas? ¿Preferencias? ¿Precios? ¿Cosas extraordinarias o extrañas?".

Todo anotado, creo que Christina aquí y Alex y Jim juntos por aquí… Comprobar su disponibilidad, buscarles transporte, vestuario, dieta, junto con una breve explicación del servicio en particular y la guía de actuación.

Giro mi silla con ruedas en el despacho para mirar que sucede detrás de mi escritorio, a través de la ventana. La oscuridad de la noche me “ciega” atravesando el cristal. Creo que voy a empezar a trabajar en casa…

(Art. 23) Una noche es una noche

Excesos, drogas, alcohol y sexo. Un cóctel explosivo que no todo el mundo es capaz de digerir. A mí con hielo y sin pasarse, gracias.

“¡Cuántas ganas de volver de la gira!” Al fin se terminó y puedo quedar con los “colegas” para tomar unas pintas en el club de moda de la capital, ya ni me acuerdo de la última vez. “¡Bua! Tíos, tenemos que montar un fiestón de los gordos y celebrar que estamos todos juntos.”

Sin duda, la idea de Pedro es buena. ¿Qué mejor manera de pasar los pocos días que estaremos por aquí todos? Y de pronto, la gran idea sale de la boca de Sergio: “¿Y por qué no aprovechamos que David se casa en un par de meses y le montamos una despedida adelantada?”

David protesta: “Pero así ya no será sorpresa… Además, queríamos algo tranquilo.” Se expresa temeroso, sabedor de que no le haremos ningún caso. Qué sorpresa, si era un hecho anunciado casi por megafonía...

Quedamos varios días a sus espaldas, repartimos tareas, cuidamos detalles, buscamos ideas nuevas y originales. Es entonces cuando recuerdo que, con la enorme oleada de bodas que se están produciendo en los últimos días, han empezado a aparecer unos negocios un tanto peculiares, que vienen de la mano. Se trata de servicios de bailarines muy polifacéticos. Antes de exponer toda la teoría, ésta ha sido aceptada y se ha convertido en el plato fuerte de la noche.

La fecha se ha ido acercando y ya es el tan señalado día. Están prácticamente todos los detalles cerrados, salvo algunas cosas que es conveniente comprar de última hora. Un apartamento gigante a las afueras de la ciudad, cercano a una playa privada, dispuesto para el día y decorado para la ocasión. Todo planificado, a esta hora un rato de relax en la playa, y un poco más tarde que comience la fiesta.

Hay más líquido de porcentaje alcohólico que comida, aunque también hay una buena ración de pizzas y hamburguesas, todo mezclado con cajas de preservativos y pociones afrodisíacas. Es, sin duda, el escenario de una curiosa obra cuyo argumento, aunque pensado, se escribirá esta noche.

Debido al nivel de vida que todos llevamos no ha sido difícil que nos saliesen amigos hasta de debajo de las piedras que se han apuntado sin pegar ni golpe, han venido con algún regalo y dispuestos a gorronear.

El día va transcurriendo según lo planificado, y la gente empieza a estar bastante “pasada”, algún que otro mareado, y varios han tenido que ser hospitalizados debido a sus excesos. Y todo esto sin poner la guinda al pastel.

Exactamente cuando el reloj toca las 23 llaman a la puerta. “¿Alguien ha llamado a los bomberos? ¿Alguien ha llamado a la policía? ¿Alguien ha pedido una ambulancia? ¿Y… unas vaqueras?”. Empiezan a entrar chicas atractivas disfrazadas de profesionales de diversos sectores y la gente empieza a cometer locuras; no estoy por la labor de contar todo lo que pasó, pues la memoria, con estas cosas, a veces falla, añade cosas, suprime otras.

La noche fue espléndida, a David le costó un pequeño tirón de orejas por parte de su chica, pero tampoco estaba muy enterada de lo que pasó realmente y lo dejo correr. Me parece que a mi buen amigo no le habría importado lo mas mínimo llevarse otros tres o cuatro tirones. Y es que una noche es una noche. Y esta fue larga y borrosa.
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Aish, si no fuese por las tildes no tendría que toquetear casi nada... xP XD

martes, 20 de noviembre de 2007

(Art. 22) ¿Truco o trato?

Acepto el trato, pero no os salvareis con ningún truco.

Cuenta mi mama que la puerta que separa el mundo de los vivos del descanso a dos metros bajo tierra en un sólido ataúd de roble se abre en esta noche, su separación es más delgada que la meramente física.

Yo siempre fui un supersticioso que disfrutaba de reírse de esos cuentos y tradiciones de anticuados y “carrozas” pasados de moda. Y esta vez, no era menos mientras desde la cocina oigo a la abuela contar sus historias de terror a los niños por Halloween.

“¡Ding dong!” Llaman a la puerta, como durante toda la noche, medio vecindario ha ido pasándose casa por casa en busca de firmar tratos, que por el momento hemos aceptado.

Abro la puerta y me encuentro con un pequeño disfrazado de hobbit acompañado de su hermana mayor que va de… Jessie Malone, nadie le habrá explicado a esta “chiquita” que esto es más divertido si el disfraz “asusta”, yo por mi parte no puedo evitar soltar una pequeña carcajada.

Voy a coger la bolsa con dulces, pero vaya se nos han acabado y no nos hemos dado cuenta. “Lo siento pero solo me queda esta piruleta.” Me miran divertidos pensando que se trata de una broma, pero pronto se van dando cuenta de que no es así.

Se marchan algo desilusionados, meten nata montada por debajo de la puerta y se marchan riendo… “Bueno, no vamos a enfadarnos, es lo justo pagar el despiste.” Así que salgo a la tienda más cercana para reponer provisiones.

Por el camino me entretengo con la curiosa imagen que muestra el vecindario, llena de mantas blancas de medio metro mal medido, esqueletos con cara, y túnicas negras con guadaña. Pero hay un par de disfraces que llaman poderosamente mi atención, son como dos zombies reventados a balazos por todas partes que parece que se tambalean más que andan, y … “¿He podido ver a través de los agujeros de su cuerpo?” Imaginaciones mías. “¡Que tiempos aquellos, en que era niño y no tenia ningún tipo de preocupación!”

En mis pensamientos estoy, cuando ya he ido y he vuelto a casa. “No me había fijado, pero este año mi madre se ha esmerado con la decoración exterior, parece un autentico infierno.” Un momento, la puerta arrancada, los cristales rotos, arañazos contra la madera exterior, sangre y restos de disfraces… Palidezco, la bolsa con dulces se me cae de las manos.

Entro en casa corriendo, el tiempo justo que tengo para ver como, esos dos tipos disfrazados de zombies, que antes me llamaron la atención, se llevan a mi familia con ellos y desaparecen con un “whof”.

Sus caras me son familiares, me recuerdan pasmosamente a los dos monstruosos zombies que me tumbaron en varias ocasiones en la batalla de Toronto… “Jonas Holtenerberg y Melvin.” Era como los nombraban entre gruñidos sus semejantes…

Esta bien, acepto el pacto, no el de truco o trato. El próximo año, sea donde sea volveré y me encargare de que los agujeros de sus cuerpos les impidan tener brazos allí donde les corresponde. El dolor que hayan podido sentir alguna vez, estará a miles de kilómetros de lo que les haré sufrir. Se que no mataran a mi familia, porque al que quieren es a mi.

Pero me da igual lo que sepan o no sepan, porque les torturare de todos modos. Solo podrán suplicar porque sea rápido y poco doloroso, muerte que no van a lograr.

(Art. 21) El día más extraño de mi vida

Una experiencia ultra sensorial, mi cuerpo poseído no responde a las órdenes de mi cerebro.

Escupo al público y están… ¡encantados! No sueltes las baquetas Felipe, que mi bajo ya esta vomitando, nuestro último éxito “Standards Down”. El público enloquece, este concierto marcha redondo, y con la gente metida en el bolsillo, abandonamos el escenario. Y nos quedamos esperando, mientras, oímos gritar desde fuera a la multitud enfervorizada: “¡Kostras! ¡Kostras!” Nos sonreímos y salimos corriendo al escenario dispuestos a “petar” con The loused-In the Stockholm.

Los groupies, se vuelven locos, se quitan la camiseta. La batería, directora del ritmo, cada vez va mas rápido, nos envuelve en un estado de locura e irraciocinio fuera de lo común. La guitarra suena mas ronca, y no paramos. No paramos de tocar la canción en cuarenta minutos, acaba el estribillo, y vuelve a empezar.

La gente se desmaya, pierde el conocimiento, estamos sin duda ante uno de los días más grandes de los kostras. Me sangran los dedos de rasgar las cuerdas del bajo, pero es que tocaría hasta con la muñeca en caso de perderlos. Y al fin… muerto de cansancio, pego un chillido y después un sonoro: “¡Gracias! A quien quede en pie” Y ahora si nos vamos.

Una chica, Büsra, dice que se llama, me esta esperando a la puerta del camerino… Su sonrisa picara ofrece las mejores condiciones y caigo en la tentación, un poco de relax después de la batalla no puede ser malo.

Llego a casa, me pego una ducha y salgo para la universidad. Mis alumnos deben estar esperando a que imparta mis últimas lecciones de baile. Voy a charlar con uno, pegarle un abrazo, halagarle… ¿Nada? Pasa de mi, me ignora, ni si quiera me mira a los ojos. ¡Que extraño! Ahí esta Ikben, una chiquilla de dieciocho años muy simpática y risueña, nada.

Todo el mundo parece dispuesto a ignorarme hoy, y empiezo a cabrearme, esto me beneficia a mi, tanto como a ellos. Yo mejoro mi baile y ellos aprenden de un profesional. Así que, con las mismas que he venido… ¡Me voy! Pero los “seguratas” de la puerta, me dicen que no, bueno, mas bien sus ojos, porque lo que es hablar no hablan.

Empiezo a tener ganas ya de partirle la boca al próximo que pille, vaya día mas extraño, primero la actitud poseída en el concierto, después esto en la universidad… voy a preguntarle a mi chica si a ella también le pasa algo extraño. Saco el móvil para llamarla y tampoco, no puedo, ni da tono, ni me dice que esta apagado, solo silencio.

Esto empieza a recordarme una historia que mi madre me contó cuando era solo un niño, un día en que la gente no recuerda que paso, pero los más mayores dicen que todo y todos dejaron de relacionarse y desaparecieron, para después volver misteriosamente a su lugar de origen al día siguiente.

La verdad que esta sensación empieza a hartarme así que me siento a reflexionar en el suelo, y cuando tengo mis ideas ordenadas veo pasar a un amigo, Romu, que me dice: “Hombre, Juanjo, ¡Qué pasa!” Y le digo: “He tenido el día mas extraño de mi vida…” Asombrado, me responde: “Eso mismo, iba yo a contarte, no puedes imaginarte lo que me ha pasado mientras estaba ensayando…”

(Art. 20) Walpurgis Noite

Un Halloween tradicional, que no sigue las tradiciones conocidas.

A las 00:13 en el cementerio. Traje negro, camisa blanca, corbata negra, zapatos negros, guantes negros, máscara blanca, chistera negra y capa negra. Cualquier rasgo característico oculto: tatuajes, cicatrices, heridas, peinado, color de pelo, ojos… Esta noche todo debe engañar a los sentidos del más perceptivo. Habrás de venir caminando, solo, si alguien te pregunta “¿qué haces?” responderás: “Voy a reunirme con mis hermanos en tan señalada fecha para atar los lazos que nunca se debieron desatar.” Para entrar sólo dirás: “Walpurgis noite.”

Eso dice la nota que he encontrado en el bolsillo derecho de mi chaqueta. No sé quién la escribe, no sé quién la entrega, no sé quién convoca esta inquietante reunión. El resto, lo sirve la curiosidad en una bandeja atractiva a la vista.

Con varias bolsas en la mano recorro agitado las calles de la ciudad, llevo mis prerrequisitos y una botella de vino tinto, si la magia de su amargo sabor no me ayuda jamás sería capaz.

Calculando cada paso intento marcar la hora exacta de llegada, con mis cuentas mentales puedo evadir mis pensamientos y temores. Ya son varias las veces que respondo a qué hago… En el preciso instante en que mis vahídos equivalen a entrar en el cementerio, dos sombras se emparejan embutiéndome entre sí.

“Walpurgis noite” y la respiración profunda e intercalada, con los ojos vendados me conducen a un extraño lugar. No ofrezco ninguna resistencia, mi mente marcha gustosa, pero mi cuerpo tiene miedo, extraña combinación.

Me encuentro en el centro de un triángulo humano, en un espacio cerrado, iluminado tenuemente por velas. Todos parecen uno, ni una sola diferencia… Un golpe, que inicia un solemne ritmo de percusión. Todos comienzan a girar manteniendo la geometría, la distancia perfecta, y la sincronización microscópica. Los brazos se mueven ondeándose e inesperadamente algún que otro giro perfectamente acompasado.

Otro duro golpe, ritmo y movimiento cesan. Mientras, todos me dan la espalda. Otro golpe, se escucha: “No conoces la hermandad”. Otro golpe, se escucha: “No hablarás de lo que no conoces”. Otro golpe, se escucha: “De lo que no conoces y no hablas, no preguntarás”. Una larga sucesión de imperativos acompañados de golpes. Respirar y callar.

Comprendo todo y asiento todo. Bebo un néctar y de este modo sello mi pacto. Mi cuerpo encuentra cambios, me arden boca, ojos y extremidades. Me siento fuerte y mis sentidos perciben la más mínima alteración.

De pronto, todas las figuras saltan sobre mí. Conocía con antelación sus intenciones, sin embargo, no las temía. Cuerpos, manos, brazos, cabezas que rozan todas las partes de mi cuerpo. Impasible, me mantengo rígido hasta que se separan.

Extraños sentimientos y pensamientos comienzan a apoderarse de mí, siento la adrenalina correr por mis venas. Otro golpe, y una sola campanada, sin duda la una de la madrugada. Las puertas se abren automáticamente y mis piernas salen despedidas en dirección al exterior acompañado de todos mis hermanos. Pierdo la presencia de mi alma y la conexión con mi cuerpo desaparece.

Despierto en mi cama, cansado… Extrañas imágenes se suceden en mi cabeza como fotografías, una orgía de sangre y gritos de terror esta teniendo lugar en mi mente. ¿Es sueño o recuerdo? Encerrado en la cárcel de mis desvaríos presencio en el suelo un traje rasgado y ensangrentado, una máscara cubierta de sangra seca y restos de carne humana.

Tomo consciencia de la realidad, y detecto el olor a muerte que inunda toda la habitación. La dolorosa verdad es que no hay ningún sentimiento humano en mí. Culpa, arrepentimiento, no. Sólo ganas de repetir en compañía de mis hermanos en la próxima noche de brujas, noche de Halloween.
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Sip, lo es :) Y recuérdame que no te diga nada en contra del síndrome del ingeniero, me das miedo ><

¡Buen relato!

sábado, 17 de noviembre de 2007

(Art. 19) La enseñanza de habilidades criminales a debate

Análisis sobre el referéndum de la propuesta de ley referente a la enseñanza de habilidades criminales en la cárcel.

Estos días en el forum público de Madrid, los habitantes más implicados defienden las posturas acerca de la nueva propuesta de ley que a continuación pasaré a analizar.

Dice el referéndum, cito textualmente: “¿Debemos prohibir la enseñanza de habilidades criminales en todos los locales de la ciudad de Madrid (Nota: públicos y privados)?".

En principio, la pregunta es sencilla, ahora las opciones se han separado de una manera un tanto curiosa, de modo que quedaría de la siguiente manera: no debe prohibirse, sí debe prohibirse y sí debe prohibirse, pero sólo en los locales públicos. La curiosidad viene en las opciones del sí. Son independientes, pero suman sus votos contra el no, de modo que la más votada de estas en caso de salir escogida es la que se implantará.

No quiero entrar a valorar en profundidad esta fórmula de consulta, un tanto engañosa a mi parecer, por la curiosa agrupación de las opciones a favor de la prohibición. Ya que es fácil deducir que podrían invertirse de la siguiente forma: Sí debe prohibirse, no debe prohibirse y no debe prohibirse en los locales privados.

Con el primer sistema se refuerza la opción más tolerante, en ese caso el sí, con el segundo sistema, que es el que no se usa, se refuerza la opción de nuevo más tolerante, en este caso el no. De manera que de una manera un tanto camuflada se alteran los resultados.

Ahora pasaré a indagar sobre el propio significado de la ley, que era el propósito primero del artículo.

La ley atenta, claramente, contra la presunción de inocencia, en este caso la libertad de enseñar y aprender. El objetivo claro de la ley es que los criminales no mejoren en su oficio dentro de la cárcel, pero esta ley supone que por tener habilidades criminales las usarás. En este caso, se está golpeando al derecho a una segunda oportunidad, y a la fe en la reinserción.

Cuando alguien roba a otra persona, obtiene un beneficio en perjuicio de otro. La lógica nos lleva a pensar que está bien castigar a alguien por perjudicar a otra persona. Pero si una persona enseña a otra, ambos son beneficiados y nadie, remarco el "nadie", es perjudicado. Esto es lo que me hace no entender el motivo del castigo por esta acción.

La respuesta fácil es que como tienen esas habilidades tanto uno, como otro, perjudicarán a muchas personas. Pero en este caso, estamos abandonando el mundo de los hechos para adentrarnos en las suposiciones. Ese “perjudicarán” es un futuro y es un probable, o un improbable.

Repito, porque quiero incidir en esto, se está presuponiendo, y los juicios de valor no son buenos antes de que sucedan los hechos, que por tener habilidades para incumplir la ley las usarás. Esto sería un equivalente a decir que por saber artes marciales atacarás a todas las personas que veas.

Además lanzo estas últimas preguntas, ¿qué diferencia hay entre hacerlo en la cárcel o hacerlo en tu casa? Si la consecuencia es la misma. ¿Qué diferencia hay entre los que ya las tienen y los que las quieren tener? Son mejores personas los que ya las tienen que los que no, y las personas que la aprendan la usarán para hacer el mal ¿Qué diferencia existe entre los que las han mejorado y los que las quieren mejorar? ¿Significa esto que debemos tratar igual a todos? Si se prohíbe la enseñanza es porque no se pretende la extensión de esas habilidades, entonces, ¿por qué no detenemos a cuantos tienen habilidades criminales? Al fin y al cabo, si todos los que pueden incumplir la ley están en la prisión nos aseguraremos de que no se incumpla la ley.

(Art. 18) Mi disfraz de presidiario

Guía básica para celebrar en Madrid tu Halloween alternativo.

Escucho mi mp3 durante largas horas con el single de los discos de moda, lo último de Billy No Talent es buenísimo. Tirado en la cama, tratando de hacer nada, disfruto de una pinta de cerveza y ya noto los efectos del alcohol. Me suelo emborrachar con facilidad, con una cerveza me basta… suele ser la undécima

El reloj del salón marca la pauta, uno, dos… ¡seis! Sin duda la noche se ha alargado mucho más de lo necesario. Cuando disfruto de buena música, en vivo o en directo, no tengo nada más en mente.

Cansado, con los ojos llorosos, pero contento. Sé que mañana me dolerá medio cuerpo… Trasnochar no es buen amigo si de la mano viene madrugar. Por suerte no es mi caso, ventajas de “rock star”.

Ese rayo de sol que se cuela por una rendija de la persiana y me golpea directo en el rostro. La boca seca, los ojos rojos, pelo revuelto, dolor de cabeza, cascos de botellas, aspecto lastimoso y casa lastimosa. Ahora arreglaré una cosa con una ducha, algo de comer y un analgésico. La otra más tarde, que ahora no tengo ganas.

Una siesta para olvidar que me aburro horrores cuando no giro, ni compongo, ni ensayo… ¡ni respiro!

Me saca de mi dulce letargo un timbrazo. ¡Me “cago” en…! Me levanto, lento hacia a la puerta, y abro. “Truco o trato” me dice un germen de metro y medio mal medido que viste una peluca loca multicolor, unas orejas de conejo y una “túnica-mantel” enorme por encima. Primera impresión, “creo que ayer me pasé con las cervezas, no más después de las 4". Se hace acompañar de otros cuatro… ¿Fantasmas? ¡Vaya, qué originales…! Se me ha olvidado Halloween completamente. “Ahora vuelvo, chicos, voy a ver qué tengo por casa". Cierro la puerta tras de mí y rebusco, está todo desordenadísimo, así no hay quien encuentre nada. Un bote de afrodisíacos, creo que yo le daré mejor uso, cuatro helados…

Al final salgo de casa, con la mejor de mis sonrisas y once cascos de botellas diciendo: “Lo siento, pero se me ha olvidado comprar algo dulce, así que, si lleváis esto a reciclar además de proteger el planeta y sentiros bien, quizás os paguen algo". Y ante sus caras de sorpresa, les planto la puerta en las narices.

“Juanjo, sencillamente perfecto, te has vuelto a superar”, y mientras veo que el plan no tiene grietas, éstas comienzan a aparecer en los cristales de mis ventanas, provocadas por las botellas que les he dado.

Salgo corriendo, pero antes de tocar el picaporte ya se habrán desvanecido como fantasmas. ¡Mierda! Las llaves… Algo bueno tendría que tener que me hayan roto las ventanas. Me quito la camiseta para evitar cortarme y meto el primer pie por la ventana… cuando alguien me toca por detrás y dice: “Perdone". Me vuelvo para preguntar, pero este idiota no atiende a razones. “Señor agente, le prometo que es mi casa, la culpa es de unos niños que…” me corta diciendo: “Claro, échele la culpa a los niños de que su camino se haya desviado".

En fin, ¿qué les voy a contar?, se me ha olvidado Halloween, pero al menos he encontrado un disfraz, a rayas blancas y negras, de arriba abajo y con una cadena enganchada a la pierna. Y aquí estoy, en el calabozo esperando a que mi abogado venga a explicar lo sucedido.

viernes, 16 de noviembre de 2007

Lista de bomberos

182467.1

Graciliano Pícolli
Dolores Bradley
Achmed Witte
Christophe Tollitte
Jimmy Rodhult
Regina Campbell
Joseph Arthur
Wes Toland
Noah Olthuis
Craig Brannon
Danielle Lambert
Johnny Muldoon
Danielle Jelleyman
Darlene Schwarz
Alan Ashley
Laine Schaeffer
Ingrid Larsson
Mark London
Diogo Perciani
Thomas Bartlett
Rose Berretta
Audrey Hullah
Julia Merget
Hauke Raedt
Mutbrecht Stadtmann
Jonny Borgquist
Rogério Hernández Munhoz
Bernadette Dassen
Sakari Järvinen
Jon Jetson
Shea Jackson
Hugh McDonagh
Antonio Burgos
Amalia Corradi
Anders Olsson
Irwin McKinley
Clara Muller
Fepiku Whitehand
Stephen Hipper
Eileen Philips
David Jacobs
Dexter Allread
Abraham Hummel
Erkki Lehtinen
Mimmi Benson
Burton Walters
Julia Muñoz
Heikki Mirsch
Therese Opdahl
David Kuehl
Gaspar Rosales
Alameda Lanchester
Chucho Cruz
Ellen Nicolas
Rodrigo Ferrer
Carlos Eduardo Vizelli
Ed Keenan
Alice Lanza
Cory Peck
Soledad Cerezo Martin
Thelma Smart
Hans Gustav Hammers-Wirtz
Marco Antônio Landau
Hazel Thomas
Patrik Paulsson
Ronny Ridgeley-Gunn
Lúcio Vinhas
Lavona Broughton
Rainhardt Beck
Emir Karahanlı
Guilherme Dino Iii
Pim Scholtes
Pâmela Edson Oliveira
Torkild Hagensen
Lisa Håkansson
Sue Nguyen
Manuela Galisteo Del Valle
Michael Moldahl
Rosemary Stewart
Todd Mawby
Helmar Unger
Morten Bruus
Ferhat Çobanöz
Darrell Gill
Virginie Bour
Adelaide Vargas
Antonio Bello Figueroa
Steven Badger
Rino Stocco
Ricky Vance
Héctor Cairós
Erik Klinkhammer
Robbie O'Brien
Jeffrey Tempe
Hoss Beatty
Peter Holm Larsen
Rimante Velikenaite
Ville Urhonen
Juho Kämäräinen
Jonathan Harris
Joost Huijsmans
Annette Cuffe
Christian Eyre
Ty Ofanengaue
Ramon Dalenberg
Jaakko Huhmarniemi
Melker Hjortstedt
Thales Rodrigues
Somer Gamboa
Twan Onland
Chris Stippel
Kia Simpanen
Flavia Moedt
Abel O'Sullivan
Hori Robinson
Thales Rodrigues
Lawrence Henderson
Ilkka Väätämöinen
Angelo Hernandez
Ludovic Noël
Jonathon Detraz
Toribia Sepúlveda
Thomas Bartlett
Jong Riggs
Harun Semiz
Yuri Michaels
Arnaldo Arago Lopez
Laís Marin Stancu
Shandi Robinette
Julián Calvo
Ramon ten Berg
Gertruda Grinevskyte
Beth Christou
Zoe Sorrentino
Joni Arvo
Eimantė Čiumbaraitė
Kevin Hack
Joop de Vreede
Robert Brown
Jimmy Eijsvogel
Sanne Rockx
Asko Metsälä
Twan Lameris
Frank Mughal
Ian Secker
Brendan Shephard
Ramon María Blanco

Youth Hostels

87226.2

HERE ARE OUR KIND HOSTS:


Amsterdam:
Melanie Sproat
221845

Ankara:
Birgitta van Rooijen
250237

Barcelona:
Gianfranco Cecchini
229701

Belgrade:
Janne Kauppi
284018

Berlin:
Sirpa Virjonen
511738

Brussels:
Danny Keene
225957

Budapest:
Cecil Jones
655258

Buenos Aires:
Ricky Hadley
229221

Copenhagen:
Wes Toland
229197

Dubrovnik:
Dave Faust
198413

Glasgow:
Cherrie Downing
230336

Helsinki:
Ramon Dalenberg
163848

Istanbul:
Stef Kraijer
229414

London:
Anki Ankie Schiefer
65576

Los Angeles:
Hartmut Hake
337811

Madrid:
Lachlan Rafter
197695

Melbourne:
Catherine Delacruz
228789

Mexico City:
Atte Näränen
225203

Montreal:
Arianna Roma
368112

Moscow:
Helena Gillstad
222936

Nashville:
Sherman Ivey
229220

New York:
Isabel Jurgens
170050

Paris:
Valéry Faye
176219

Porto:
Reg Mccloud
169289

Rio de Janeiro:
Achmed Witte
229458

Rome:
Nílton Francisco Damerau
209433

São Paulo:
Achmed Witte
230771

Singapore:
Pippo Capuano
475004

Stockholm:
Peter McGinnes
184452

Talinn:
Hazel Thomas
230872

Toronto:
Pascaline Foulquier
229736

Tromsø:
Luis Afraga
212390

Vilnius:
Dave Simcock
234277

Productores 5*

197250.1

A:
Abel Trafford Usual location: London (Will fly anywhere if plane ticket is bought for him), 10*
Abraham Hummel Usual location: New York, 5*
Adam Peters Usual location: Vilnius, 5*
Agnes Gupta Usual location: Vilnius, 5*
Ajdar Sayınbatur Usual location: Random (Always on tour), 5*
Albert Kartaskin Usual location: Moscow/Europe in generel, 6*
Alex Madden Usual location: Amsterdam, 5*
Alexander Corbin Usual location: Rio de Janeiro, 6*
Alexander Toon Usual location: London, 5*
Alexander Vyrubova Usual location: Random (Always on tour), 5*
Alma Slator Usual location: Random (Always on tour), 5*
Anita Pinkney Usual location: Rio de Janeiro, 5*
Annie Walker Usual location: Porto/Berlin, 5*
Ari Tuorinsuo-Byman Usual location: Random (Always on tour), 5*
B:
Bas Sramek Usual location: Amsterdam, 5*
Berke Bull Usual location: New York, 5*
Beth Luck Usual location: Melbourne, 5*
Billy Cullen Usual location: Los Angeles, 5*
Blake Chapman Usual location: Rome/London, 5*
Bobbie Beune Usual location: Amsterdam/London, 5*
Bruce Logsdon Usual location: Melbourne, 5*
Bruno Beardsley Usual location: Porto/London, 5*
Burt Pearce Usual location: New York, 6*
C:
Carlos Gustavo Pavia Marques Usual location: Singapore/Brussels, 6*
Caroline Noland Usual location: New York/Los Angeles, 5*
Cecil Hollingsworth Usual location: New York, 5*
Chris Harrison Usual location: Random (Always on tour), 5*
Chris Ralston Usual location: London/New York, 5*
Christopher Wainwright Usual location: Glasgow, 5*
Cindy Spacey Usual location: New York, 5*
Clyde Dickerson Usual location: Los Angeles, 5*
Corazón Collado Cervero Usual location: Random (Always on tour), 5*
D:
Dan Barrera Usual location: Random (Always on tour), 5*
Daniel Hargrave Usual location: Melbourne, 5*
Danny Gamage Usual location: Nashville, 5*
Danny Walters Usual location: London, 5*
Debbie Faulkes Usual location: Random (Always on tour), 5*
Devrim Eskici Usual location: Will travel anywhere, 10*
Donald Skejic Usual location: Dubrovnik, 5*
E:
Ed MacFadyen Usual location: Montreal, 5*
Elinor Monk Usual location: Random (Always on tour), 5*
Erkki Lehtinen Usual location: Helsinki, 5*
F:
Floramaria Leponen Usual location: Random (Always on tour), 5*
Florian Weichhaus Usual location: Berlin/New York, 5*
Forest Hanson Usual location: Melbourne, 5*
Frank Dickie Usual location: Random (Always on tour), 5*
G:
Gabriel Carlier Usual location: Paris, 5*
Garrett Mason Usual location: Singapore/Paris/Madrid/Istanbul, 5*
Garse Skredenaite Usual location: Random (Always on tour), 5*
Gerry Jones Usual location: Glasgow, 5*
Gert van der Drift Usual location: Amsterdam, 5*
Gina Irvine Usual location: Random (Always on tour), 5*
H:
Hanna Komulainen Usual location: Porto, 5*
Howard Peak Usual location: London, 5*
Hugo Nyhander Usual location: Random (Always on tour), 5*
I:
Ikben Şen Usual location: Random (Always on tour), 5*
İlke Şirince Usual location: Istanbul, 8*
Irma Navas Sánchez Usual location: Amsterdam/Madrid, 5*
Isabel Toth Usual location: Amsterdam, 5*
J:
Jaak Treier Usual location: Istanbul, 10*
Jae Finley Usual location: New York, 5*
James Butler Usual location: Paris, 5*
Janet Bowie Usual location: New York, 5*
Jason Hardiman Usual location: New York/Nashville 5*
Jason Rider Usual location: New York/Berlin/Sao Paulo, 7*
Jefferson Murry Usual location: Amsterdam/Toronto, 5*
Joann Baines Usual location: London, 5*
Jonathan Richards Usual location: New York/London, 5*
Jorge Frizera Júnior Usual location: Sao Paulo, 5*
Juho Kämäräinen Usual location: Berlin, 5*
K:
Kalle Ihamuotila Usual location: Random (Always on tour), 5*
Karel Krul Usual location: Amsterdam/Stockholm, 5*
Kevin Baiad Usual location: Copenhagen/Rio de Janeiro, 5*
Kirk Chapman Usual location: Random (Always on tour), 5*
Kristin Gould Usual location: New York, 5*
L:
Lasse Raula Usual location: Random (Always on tour), 5*
Lawrence McEwan Usual location: Random (Always on tour), 5*
Lawrie Nightingale Usual location: New York, 5*
Letha Pease Usual location: New York/Berlin/Buenos Aires, 5*
Lewis Glendinning Usual location: Random (Always on tour), 5*
Lianne Brantley Usual location: Amsterdam, 5*
Louis Freeman Usual location: Madrid, 6*
Luana da Cunha Júnior Usual location: Barcelona, 5*
Luana Lindmeier Usual location: Random (Always on tour), 5*
Lucille Barnett Usual location: Glasgow, 7*
Luís Fernando Alvarez Usual location: London, 5*
M:
Maiken Juul Mortensen Usual location: Copenhagen/London/New York, 5*
Marcelo Lara Campos Usual location: Random (Always on tour), 10*
Maria Hämeenniemi Usual location: Helsinki, 5*
Marijn Beek Usual location: Amsterdam, 5*
Marijn ter Laak Usual location: Amsterdam, 5*
Markku Kivimäki Usual location: Random (Always on tour), 5*
Marlon Fulci Usual location: London, 7*
Marquita Thorn Usual location: Nashville, 7*
Marya Dejesus Usual location: London/Brussel/Paris/Rome, 5*
Matti Laine Usual location: Porto, 5*
Merlin Kimball Usual location: Los Angeles, 5*
Michael Gardner Usual location: London, 10*
Michael Johnson Usual location: London, 5*
Mikey Miller Usual location: New York, 5*
Mirjam Krul Usual location: Amsterdam, 5*
N:
Neil Malcolm Usual location: New York/Porto/Paris, 5*
Nisan Bursa Usual location: Istanbul, 6*
Nixie Weichhaus Usual location: Random (Always on tour), 5*
Nuran Aksel Usual location: Istanbul, 5*
O:
Ole Jørgen Svemo Usual location: Random (Always on tour), 5*
Oriane Millot Usual location: London/Paris/Helsinki (Will move to these cities if needed aswell - unless on tour), 5*
Orhan Tayfun Usual location: Istanbul, 10*
P:
Pablo Perez Usual location: Random (Always on tour), 5*
Paris Collins Usual location: Porto/Glasgow, 5*
Patrick Hall Usual location: New York, 5*
Patrick Northall Usual location: Random (Always on tour), 5*
Patrick Statton Usual location: London, 5*
Paul Barnes Usual location: New York, 5*
Paul Weber Usual location: London, 5*
Paulus de Beer Usual location: Melbourne, 5*
Pedro Cabrera Usual location: Random (Always on tour), 5*
Peer Berg Briese Usual location: Random (Always on tour), 5*
Peter Holm Larsen Usual location: Copenhagen, 5*
Q:
R:
Ramon Dalenberg Usual location: Amsterdam, 6*
Ramona Rubio Llorente Usual location Barcelona/Madrid, 6*
Raquel Gonzalez Usual location: New York, 5*
Reg Cornell Usual location: New York/London, 5*
Regina Campbell Usual location: Toronto, 5*
Renee Harvey Usual location: New York/Amsterdam, 5*
Richard Harle Usual location: Paris, 5*
Rick Reinders Usual location: Random (Always on tour), 6*
Ronja Ulmonen Usual location: Random (Always on tour), 5*
Rory Amos Usual location: New York, 5*
Rosamond Duke Usual location: London/Copenhagen, 5*
S:
Sabine Gessler Usual location: New York, 5*
Sam Pokelainen Usual location: Random (Always on tour), 5*
Sebastian Zemann Usual location: Random (Always on tour), 5*
Seda Karahan Usual location: Random (Always on tour), 6*
Shannon Eaves Usual location: Paris, 5*
Siaki Dodson Usual location: Melbourne, 5*
Simo Kurttio Usual location: Random (Always on tour), 5*
Sol Woodward Usual location: London, 5*
Stephan Adamson Usual location: Random, 5*
Stephen Davis Usual location: London, 5*
Su Kusçu Usual location: Istanbul, 6*
T:
Terje Østnes Usual location: Tromso, 5*
Theo Powell Usual location: New York, 5*
Torben Kühn Usual location: Rome/Berlin, 5*
Tracy Westlake Usual location: Will travel anywhere, 5*
Tuomo Segejeff Usual location: Helsinki, 5*
Twan Lameris Usual location: Random (Always on tour), 5*
U:

V:
Valéry Faye Usual location: Paris, 5*
Vanessa Zarbo Usual location: Rome, 5*
W:
Walsh Allen Usual location: Random (Always on tour), 5*
Willena Zuniga Usual location: Random (Always on tour), 5*
X:
Xavier Higginbotham Usual location: Random (Always on tour), 6*
Y:
Z:

(Art. 17) Las bestias cazan de noche

El relato que me transmitió un amigo, y que yo adorno con mi prosa para ustedes.

La madrugada de Halloween me desperté a saber en qué hora por el martilleo del reloj. Su golpeo metálico y molesto me trajo las mil historias que acerca del día de hoy he escuchado con el paso de los años. Intente dormir de nuevo, pero una vez engrasada, la imaginación es como un tráiler de dieciocho ruedas desbocado del que no sirve pisar el freno.

Así, rápida llego la mañana, mala noche. En ocasiones tuve que girar la cabeza ante el crujir de los cristales que reciben el choque del viento. Las risas y pasos acelerados en el pasillo, me agitan por un momento. Pronto me doy cuenta, las fieras han despertado.

Aparecen por el marco de la puerta, corriendo los tres diablos y saltan sobre la cama… Su madre, despierta sobresaltada y ellos ríen traviesos… Ya van tres somieres en lo que llevamos de mes, pero el amor no tiene precio, ¿no es así?

Toda la tarde con ropa por aquí y por allá, un poco de maquillaje… Listos para ir pidiendo casa por casa. Este año tenemos, una diablesa, un fantasma, un duende y dos muertos vivientes ya entrados en años.

“Cariño, no olvides coger las máscaras.” Ya se me olvidaba algo, les veo marchar cogidos de la mano por la calle residencial, cojo todo lo que falta, y el mulo de carga sale de casa y les alcanza en un suspiro. Repartimos las mascaras y ¡a dar sustos! Recorremos el vecindario y media ciudad.

Truco o trato, y caramelos, dulces, “chuches” bombones, juguetes… Que van a parar a las bolsas. Pienso en alto: “Creo va siendo hora de marchar para casa.” “Jos” varios, para variar.

Al final, a regañadientes, la procesión marcha solemne a casa. Siempre me toca hacer de malo, y hoy hasta llevo el disfraz.

Una ráfaga de aire se lleva el gorrito de mi duende favorito, y se cuela en una verja. “Lo que faltaba” me digo. El “peque” tiene una rabieta tremenda, y no acepta que ya compraremos otro, quiere ese y punto. “Id yendo, salto la verja cojo el dichoso gorro y luego os cojo.”

Ella le espera en casa, se retrasa, no llega. El viento parece gritarle un llanto que susurra su nombre. Las puertas de la casa han crujido sobre sus goznes, con un chirrido agudo, prolongado, y estridente.

Cada vez más pálida, mas inquieta, mas atemorizada, casi a punto de gritar, se arrebuja y esconde entre las sabanas, buscando guarida. Así pasaron las horas, la una, las dos, un lustro, las décadas, esta noche es eterna.

La cálida luz del día, ella se ríe de sus miedos y remolona, se despereza entre la seda. Abre los ojos, y un sudor frío recorre su cuerpo, una palidez mortal invade su cuerpo. Enganchado sangriento al cristal de la ventana, el gorro verde de duende, descansa cómplice silencioso.

Dicho y hecho, me cuelo como un quinceañero en el jardín, busco el gorro… “Aquí esta.” Me levanto y cinco hombres trajeados con una mascara siniestra me rodean. No me transmiten buenas sensaciones, pero la primera reacción es de risa, aun hoy pienso que de miedo, después me voy dando cuenta de que es muy serio.

Impasibles se lanzan sobre mí, me arrancan la piel a tiras, desgarrándola con ansiedad, clavando sus uñas para hacer mas dolorosa la palanca, el dolor de mi alma es casi mayor que el de mi físico. Cuando mi cuerpo yace abierto en carne viva sobre el césped, clavan sus dientes en mis órganos, aun estoy vivo cuando veo como se pelean entre gruñidos por devorar mi corazón. Son bestias disfrazadas de hombres. Mi espíritu entristecido abandona mi ser.

Un amigo que estuvo por las calles de la ciudad, paseando de noche, me explica, que pasó la noche de Halloween. Vio cosas horribles.

Las bestias trajeadas sembrando el terror sobre la ciudad, asesinando indiscriminadamente, haciendo de la más absoluta violencia una poesía, un arte oscuro y oculto. Y una mujer, hermosa, desmelenada y pálida como la luna misma, casi plateada, que con sus pies desnudos, arroja gritos de terror, mientras da vueltas sobre el jardín en que murió su amado.

Todas las noches de Halloween, me mantiene despierto su relato, y hoy soy yo quien se lo transmite a ustedes.
___

Comentario del Editor
Pues muy mal estrenado xD
Gracias, anda :P Un saludote

jueves, 15 de noviembre de 2007

Habilidades ordenadas por ID

Esta lista ha sido chorizada de una publicada en el foro general en español por eduardo garrote.

1 Producción de discos
2 Manipulación de la Prensa (básica)
3 Percusión (básica)
4 Violín
5 Guitarra Acústica
6 Piano
7 Trompeta
8 Animación (básica)
9 Modelaje (básica)
10 Moda (básica)
11 Maquillaje (básica)
12 Modales (básica)
13 Baile (básica)
14 Letras (básica)
15 Desfile (básica)
16 Atractivo Físico (básica)
17 Crimen (básica)
18 Composición (básica)
19 Detective (básica)
20 Sexo
21 Derecho (básica)
22 Medicina (básica)
23 Economía (básica)
24 Canto (básica)
25 Flauta
26 Técnicas de DJ (básica)
27 Banjo
28 Armónica
29 Saxofón
30 Bajo
31 Instrumentos de viento-madera (básica)
32 Instrumentos de Cuerda (básica)
33 Instrumentos de viento-metal (básica)
34 Intrumentos de Teclado (básica)
35 Rock
36 Rock Moderno
37 Heavy Metal
38 Punk Rock
39 Electrónica
40 Pop
41 Hip Hop
42 Rhythm & Blues
43 Reggae
44 Música Étnica
45 Country & Western
46 Jazz
47 Blues
48 Música Clásica
49 Retórica
50
51 Comedia (básica)
52 Contabilidad
53 Desfalco
54 Allanamiento
55 Escapar de la cárcel
56 Sexo Tántrico
57 Yoga (básica)
58 Religión (básica)
59 Relaciones Públicas
60
61 Hábitos Adecuados Para Beber
62 Cómo Salir de Marcha toda la Noche
63 Maestría en yoga
64 Carterismo
65 Artes Marciales (básica)
66 Dominio del Jiu-jitsu
67 Conocimiento Callejero
68 Supervivencia Callejera
69 Componer coros
70 Componer Baladas
71 Componer Llena-Pistas
72 Componer Easy Listening
73 Componer Himnos
74 Componer Canciones Comerciales
75 Componer música para músicos
76 Componer Sencillos
77 Gaita
78 Guitarra Dobro
79 Clarinete
80 Violonchelo
81 Contrabajo
82 Batería
83 Dulcimer
84 Darbuka
85 Arpa
86 Laúd
87 Mandolina
88 Oboe
89 Flauta de Pan
90 Tuba
91 Ukelele
92 Xilófono
93 Cítara
94 Guitarra Eléctrica
95 Voz Principal
96 Segunda Voz/Coros
97 Robar en Tiendas
98 Medicina Profesional
99 Trombón
100 Farmacología
101 Botánica (básica)
102 Supervivencia en Zonas Salvajes
103 Acordeón
104 Fotografía (básica)
105 Cocina (básica)
106 Arte y diseño
107
108 Flamenco
109 Música Africana
110 Actuación (básica)
111 Fotografía en Cine y TV
112 Pintar graffitis
113 Veterinaria
114 Rapeo (básica)
115 Reconocimiento de huellas dactilares
116 Análisis de ADN
117 Analisis de imagenes
118 Astrología (básica)
119 Ilusionismo (básica)
120 Ilusionismo en Escenario
121 Farmacología Avanzada
122 Liderazgo (básica)
123 Retórica Profesional
124 Ciencia (básica)
125 Ciencia Avanzada
126 Ingeniería (básica)
127 Ingeniería Avanzada
128 Saber Popular
129 Comedia Profesional
130 Dominio del Aikido
131 Lucha con los puños
132 Lucha con los puños avanzada
133 Dominio del Kung Fu
134 Poesía Profesional
135 Saltar Sobre el Público
136 Danza Erótica
137 Lanzar Fuego por la Boca
138 Improvisación Musical
139 Moonwalking
140 Breakdance
141 Efectos Especiales (básica)
142 Fuegos Artificiales Avanzados
143 Magia de Iluminación
144 Invocación Ritual
145 Control del público
146 Baile Tradicional
147 Conocimiento de ordenadores (Básica)
148 Organización de Fiestas (básica)
149 Apagar Incendios (básica)
150 Provocar Incendios
151 Química
152 Ingeniería Ambiental
153 Armas Especiales y Tácticas
154 Operaciones encubiertas
155
156 Contrabando
157 Enseñanza (básica)
158 Pedagogía Avanzada
159 Sigilo (básica)
160 Historia Antigua
161 Lingüística
162 Idiomas clásicos
163 Costura (básica)
164 Armas de Fuego (Básico)
165 Didgeridoo
166 Botánica Avanzada
167 Capturar Animales
168 Entomología
169
170
171
172 Chapman Stick

(Art. 16) Mi pasión turca

Después de casi un año entre escenarios y asfalto, aderezado con algún que otro viaje aéreo ha llegado a su fin nuestro “Wiiiiii Tour”. Un placer compartido que se inició a ritmo de tango en Buenos Aires y terminó con los participantes tocando el didgeridoo en la otra parte del mundo.

Muchos amigos y conocidos, otros no tan amigos pero que han terminado siéndolo. Y es que hasta las “rockstars” necesitan de otros mortales de vez en cuando y nada mejor que compartir cartel con gente querida.

Muchas cosas han ido pasando durante este tiempo, discos nuevos, cambios de formación, niños y niñas que vienen al mundo tras salvajes orgías adulteradas con drogas duras…

Ahora tomemos aire y dejándonos caer en el sillón lo soltamos todo de golpe, más de quince días de merecido relax… O eso pensaba yo, ingenuo de mí, hasta que Amaia, líder de mi grupo, apareció por la puerta de mi casa loca y revolucionada, gritando: “¡Nos vamos a Estambul!”. Ahora iría la cara de sorpresa -”Bueno, unas vacaciones exóticas, no le hacen mal a nadie”. Mientras mi cabeza da vueltas por cristalinas playas, una voz sigue taladrando el oído: “La amiga de una amiga me ha dicho que Estambul es una ciudad preciosa…”.

Nada más lejos de la realidad, cuando acabó su larga explicación comprendí que no iba a tener muchas vacaciones. Y el gusanillo de la enseñanza iba entrando en mi cabeza.

Y así, con lo puesto, que siempre es poco, tomé el primer ultrarrápido que salía del aeropuerto con destino a Estambul, y me fui dirección Turquía. Nada más llegar, buscar un piso “bueno, bonito, barato” que alquilar antes de que el sol se ponga. Llamar a los conocidos para informarles de que ya he llegado y estoy bien, y a algún otro que se mueve por aquí desde los últimos días. Después de ordenar el contenido de la maleta vacía en el armario, hacia la universidad.

Sin habla, es lo más aproximado que puedo decir. Cerca de cinco mil personas entrelazando conocimientos y compartiendo las más enriquecedoras experiencias didácticas.

He decidido que ya que soy un especialista en eso de enseñar el cuerpo y hacerlo mientras bailo, qué mejor que enseñar eso a mis alumnos, además me ayudará a progresar profesionalmente.

Ya llevo cerca de cuatro días por aquí, tengo más de veinte estudiantes y unos cien que pretenden llegar a serlo. Todos los días hablo con ellos para intercambiar impresiones, y llego a casa agotado. Si no termina conmigo, otro día les contaré cómo acaba mi particular pasión turca.
___
Comentario del Editor
Ya era hora que alguien hablase del fin de la gira, y también que enviases algo para Bcn, que sólo te he visto por México >< XD

He cambiado las hojas de eucalipto por lo del digeridoo, espero que no te importe :P Y vigila las tildes xP

(Art. 15) ¿Botox? Sí, gracias

La historia de la cirugía estética en mis propias carnes.


Más de cinco años sobre escenarios de todo el mundo haciendo vibrar con mi música a públicos de todas las edades y colores. Esos comienzos dudosos en que me desvivía por mi música y decía no al alcohol, no a las drogas, no a los groupies. Sólo mi bajo y mi furgoneta pueden hacerme feliz.

No estaba equivocado del todo, aunque con el tiempo las mentes más puras se adulteran y llegan el alcohol, las drogas, el sexo fácil… Una carrera que marcha deprisa, sin rumbo fijo y sin frenos.

Cada mañana, jurarse que no volverá a repetirse lo de anoche... no es la manera correcta de manejar esta situación, hay que pegar un giro drástico.

Vuelvo a quedar con los amigos, disfruto mi música con menos excesos y cuando se “baja el telón” procuro ser responsable de mis actos. Aun así falta algo en mi vida, quizás necesite una mujer que sepa enderezar mi caso.

¿Cómo conseguir una cita? Manual del “metrosexual” básico, peinado última moda, ropas de marca súper transgresora, forma de hablar y actuar cambiada por el perfecto yerno y adentrarse en la noche examinando los garitos más de moda.

Empiezo a conocer bastantes chicas, algunas muy interesantes. Pero no hay manera de dejar de ser el eterno amigo “osito de peluche”. Me comparo con los “latin lovers” actuales y a su lado soy un aprendiz de bohemio.

Pero todo tiene solución, nadie dijo que fuese fácil, barato, sano o ético… Así que juguemos a operarnos. Abdominales, labios… Botox aquí, botox allá, corta un poco de aquí… ¡Sí! Pon un poco allí.

No tengo personalidad, no tengo integridad, ni si quiera tengo partes de mi cuerpo que antes sí tenía o no estaban en un tarro. ¡Pero tengo un aspecto alucinante, oiga!, así que que me quiten lo “bailao'”.